*La operación en conjunto entre la SEMAR y COFEPRIS, llamada ALBATROS II, incautó un total de 4,681 cajas de medicamento
Xalapa, Ver., 14 de diciembre de 2023.- Autoridades de COFEPRIS, en conjunto con la Secretaría de Marina (SEMAR), informaron que allanaron y cerraron un total de 31 farmacias en la ciudad costera de Ensenada, Baja California. Esto debido a que se detectó que estaban vendiendo pastillas falsas o contaminadas con fentanilo, una sustancia peligrosa y potencialmente mortal.
La operación llamada ALBATROS II incautó un total de 4,681 cajas de medicamentos. La Marina emitió un comunicado de prensa asegurando que se tomó la medida debido a la venta de medicamentos contaminados con fentanilo, lo que representaba un riesgo para la salud pública.
Las autoridades de salud de México realizan pruebas en la mercancía incautada. Ensenada se encuentra aproximadamente a 100 kilómetros al sur de la ciudad fronteriza de Tijuana.
El anuncio del operativo sustenta lo que algunos investigadores estadounidenses de la Universidad de California, señalaron, hace casi un año: que las farmacias mexicanas estaban ofreciendo medicamentos controlados como Oxicodona, Xanax o Adderall, pero que las pastillas a menudo eran falsificaciones contaminadas con fentanilo.
En total, se inspeccionaron 53 farmacias y se encontraron falsificaciones sospechosas en 31 de ellas. Como resultado, se colocaron carteles de suspensión temporal en las puertas de estos establecimientos. Aparentemente, la venta de estas pastillas estaba dirigida principalmente a turistas.
Cabe mencionar que, en agosto, México cerró 23 farmacias en los centros turísticos de la costa caribeña después de una redada de cuatro días en la que se inspeccionaron 55 farmacias en Cancún, Playa del Carmen y Tulum.
La Marina indicó que las farmacias generalmente ofrecían estas pastillas sólo a turistas, las anunciaban, e incluso ofrecían servicios de entrega a domicilio.
El fentanilo es un opioide sintético mucho más potente que la morfina y se estima que ha causado alrededor de 70,000 muertes por sobredosis al año en Estados Unidos. Los cárteles mexicanos lo producen a partir de productos químicos precursores contrabandeados desde China y, a menudo, lo comprimen en pastillas que se asemejan a otros medicamentos.