En el ámbito de su agenda de trabajo por Alemania, el Presidente de Colombia, Gustavo Petro, advirtió: “A mí me quieren tumbar del gobierno porque digo estas cosas, soy un outsider en América Latina, pero yo creo que es importantísimo que la Izquierda piense de nuevo en cambiar el mundo”.
En conferencia magistral, ante la Fundación Friedrich-Ebert-Stiftung (FES), el mandatario colombiano aseguró que existe una izquierda europea que no sabe exactamente qué hacer, a diferencia del fascismo, que sí está avanzando, y dijo que lo pudo ver en las calles de Madrid; organizada contra él por ser latinoamericano, por ser de otro color de piel.
Asimismo, subrayó que para los progresistas la política está aliada a la ciencia; es decir, la razón que guía a la decisión política, porque la razón es la esencia de lo que han sido los movimientos progresistas en los últimos siglos; entonces, la razón de la Izquierda es la razón científica.
A su vez, el Jefe de Estado consideró que la caída del Muro de Berlín tuvo como consecuencia, también, la aparición de un nuevo conservadurismo que debilitó al movimiento obrero en todo el mundo, y con ello hubo igual una pérdida de valores de izquierda.
Petro enfatizó la necesidad primera de atender la crisis climática, que se ha vuelto sólo retórica en los encuentros entre mandatarios, por lo tanto, sólo a la izquierda latinoamericana le puede interesar esto porque toda su vida ha luchado por el cambio y la transformación
“La izquierda, por tanto, sí tiene un camino de mostrar las cosas nuevas, de mostrar los límites del capital para resolver el proceso de la crisis climática”.